Las empresas que buscan generar el mayor valor a través de sus activos y el logro de sus objetivos organizacionales, desarrollan una gestión de activos comprometida con encontrar un balance entre el desempeño funcional, los costos financieros, el riesgo, la calidad, y los impactos ambientales y sociales.
La planeación estratégica como herramienta utilizada en la gestión de activos, permite encontrar el método apropiado, los procesos y las actividades ajustadas en un perfecto balance para lograr objetivos tan importantes como el desempeño, confiabilidad y disponibilidad de los activos.
A partir de la identificación de las actividades y buenas prácticas estratégicamente adecuadas para implementar y operar; se obtiene la posibilidad de definir de manera óptima los recursos a emplear, obtener las herramientas de control y garantizar la disponibilidad y calidad esperados cuando se ejecuta el mantenimiento.
Las empresas de alto desempeño revisan su planeación estratégica de la gestión de activos periódicamente para encontrar los desajustes o brechas entre los requerimientos de los activos y la gestión que se está realizando. Es una realidad que la constante evolución empresarial de hoy hace que las organizaciones ajusten con mayor constancia y detalle el modo en que se hacen las cosas en busca de la sostenibilidad.
Contenido:
- Desempeño y resultados esperados de los activos y el sistema de gestión.
- Entorno de operación de los activos.
- Conveniencia de actividades para los activos durante el ciclo de vida.
- Aplicabilidad de tipos de mantenimiento y buenas prácticas.
- Consideración de riesgos en la estrategia.
- Elaboración plan estratégico de gestión de activos.